Quizás Dolores Etchevehere se esté empezando a acercar al modelo de persona rica que imagina la profesora venezolano-británica Carlota Pérez, especialista en los impactos de la tecnología en el desarrollo socioeconómico. “Necesitamos que los ricos muestren un modelo aspiracional distinto, un modo de vida más sustentable, donde dejen de ostentar productos y se enfoquen en servicios, intangibles y relaciones”, proponía Pérez el viernes, en una clase abierta del seminario de Economía de la Tecnología y la Innovación de la Maestría en Economía de la Universidad de Buenos Aires. “El cambio tiene que ir hacia la desmaterialización de nuestro modo de vivir. Eso es menos obvio que la materialización que ocurrió durante la posguerra, cuando se instaló la sociedad de consumo. Tenemos que mejorar reduciendo, reduciendo, reduciendo; no es tan fácil. Es más probable que ocurra con la gente más educada primero. Necesitamos que los ricos lo adopten”. Pérez hablaba de cambios como reemplazar el auto por la bicicleta y pasar a una economía del tipo product as a service, donde se pueda, por ejemplo, alquilar un coche con facilidad para trayectos puntuales. También, de aprovechar la digitalización para aliviar la presión sobre las materias primas. “Si se logra que las políticas de los países desarrollados influya en que la gente adopte este modo de vida verde e inteligente, con las TIC, quizás China después los siga, en lugar de imitar todavía el american way of life. Podría ser una gran ventaja para Europa convertirse en los líderes del nuevo modo de vida sustentable. Pero para que sea aspiracional tenemos que tener el modelo.”