“#OCEANAZO es una Rebelión Costera Global” dice en el evento de Facebook que difunde la protesta. “Esta es una rebelión de más de 30 acciones en más de 15 países. Estamos protestando por la contaminación costera y la devastación causada por las compañías petroleras y los países e instituciones que las apoyan”. Y después: “Únanse a esta manifestación internacional, traigan su creatividad, tambores, pasos de baile y prepárense para escuchar y presenciar las historias de las personas y áreas más afectadas (MAPA)”.
Un acrónimo nuevo, Most Affected People and Areas. En español, Personas y Áreas Más Afectadas, funcionaría perfecto como PAMA. La busco y no la encuentro; quizás no esté en ese nivel de difusión todavía.
Dice la Wiki: “Personas y áreas más afectadas, también conocidas por su acrónimo MAPA, es un término que representa a los grupos y territorios afectados de manera desproporcionada por el cambio climático, como las mujeres, las comunidades indígenas, las minorías raciales, los jóvenes, los ancianos y las personas más pobres. Estas comunidades son las más afectadas por las emisiones de carbono y el cambio climático. En particular, con el surgimiento de movimientos de base que tenían como objetivo la justicia climática, como Fridays for Future, Ende Gelände o Extinction Rebellion, la conexión de estos grupos en el contexto de la justicia climática se volvió más importante”.
Lleva unos años. La Wiki remite a una nota de The Guardian de septiembre de 2020. “Estamos en una emergencia global que nos afecta a todes. Sin embargo, no todes están sufriendo las consecuencias de manera equitativa”, decía Greta Thunberg. Y la nota completaba: “Las protestas se enfocarán en MAPA, un nuevo término por ‘las personas y áreas más afectadas’, que les organizadores prefieren a frases anteriores como ‘sur global’.
Un momento, ¿qué?
Bueno, eso, que somos MAPA / PAMA. Más vale ir asumiéndolo.
Qué delgada la línea entre MAPA y las “zonas de sacrificio”.