“Estamos tan acostumbrados
a ver todo tipo de minerales en nuestro día a día
que no nos paramos a pensar en los secretos que guardan
Aunque solemos contemplarlos con fascinación algunos de ellos pueden ser mortales
Un mal descubrimiento
podría acabar con la humanidad Lanzando gas venenoso por los aires
y oscureciendo la atmósfera con radioactividad
La edad de los metales sigue vigente
La edad de los metales
que hace más de ocho mil años siguió a la de piedra
La edad de los tecnometales”
Tecnomineralia es “un poema documental sobre el uso y explotación de minerales en la tecnología”, tal como describe su autor, el poeta mexicano Horacio Warpola. El programador Dani Bautista le dio forma de net art.
“Ya en el siglo XVI el alquimista Paracelso sostenía que «sólo la
dosis hace el veneno»
La muerte está repleta de minerales vivos
El carbono nunca está feliz
Siempre está intentando encontrar otra configuración”
Está escrito con tipografías que remiten a libros medievales, que hacen trabajosa la lectura y llevan a pensar en la técnica,en la extracción, en la dificultad.
“En homenaje a cientos de técnicos electrónicos que enaltecen con su
preciosa labor al gremio y protegen el planeta alargando la vida útil de
los componentes electrónicos
Estamos acabando con los minerales de la tierra y si no hacemos algo al
respecto pronto la tecnología que usamos hoy deberá ser descontinuada
pues no existirá el material para desarrollarla
Ese aparato que miramos unas 150 veces al día
Resulta paradójico
(que ese instrumento)
Pueda ser también un instrumento de opresión
Muchos de los dispositivos electrónicos que compramos se han relacionado con la financiación de conflictos armados
Estos países son muy ricos en algunos minerales (el tungsteno, el tantalio y el estaño)
imprescindibles para que (…) cualquier dispositivo electrónico se encienda
La nanotecnología es una combinación de minerales y metales
Dispuestos a transformarse por nosotros
Nosotros queremos extender esa aproximación al sector de los minerales
Para su libre de conflicto
(Antimonio, berilio, cobalto,
galio, indio, magnesio, niobio,
tantalio, volframio) (…)
Sin minerales no hay tecnología.”
Categoría: número 60 (buscando aquel martillo de Thor)
2. Meta
¿Y de qué está hecho el metaverso sino de tecnominerales?
Hay dos maneras de errar el timing: demasiado tarde o demasiado temprano. Logré las dos con “metaverso”, llamada a abrir el diezpalabras de la semana pasada, que no existió. Ahora es tarde, pero en abril, cuando “metaverso” salió en la N34P1, era demasiado temprano. Qué vacer; vamos con “Meta”. Meta.
“Elegimos ‘Meta’ porque puede significar ‘más allá’ y encierra nuestro compromiso con la construcción de tecnologías sociales que nos lleven más allá de lo que hoy es posible a través de la conexión digital”, dijo Mark Zuckerberg el 28 de octubre. Fue en la presentación de la nueva marca que englobará a Facebook, Messenger, Whatsapp, Instagram y el proyectado metaverso, así como a los dispositivos anexos.
¿Y de qué está hecho Meta, el germen de la Zuckerbergcracia (N19P06), sino de minerales en contacto?
Me gustó este gráfico sobre las siete capas del metaverso. La última palabra de la capa interna (“infraestructura”) es “materiales”: para construir la virtualidad hacen falta tecnometales.
La noción de metaverso como espacio digital habitable, de videojuego para vivir, a lo Second Life o Matrix, no la inventó Zuckerberg; circula en la ciencia ficción desde los 90, y empresas como Epic Games o Roblox invierten en ella desde hace años. En este gráfico se ven las que ya están metidas.
“Todo esto huele mal. Me encantaría participar y explorar el Metaverso si fuera un proyecto abierto como lo fue en sus orígenes la World Wide Web (…). El Metaverso es desde el vamos un walled-garden de una de las corporaciones menos transparentes y más poderosas del capitalismo de datos”, dijo Carlos Scolari. Un tuitero resumió al metaverso con esta imagen full tecnomineralia. Me acordé de una novela distópica donde la humanidad vívía entre ratas pero una pastillita hacía percibir una realidad virtual dorada. Pablo Valle la reconoció: Congreso de futurología, de Stanislaw Lem, precursora de Matrix.
Como recuerda Nicolás Piccoli en Menciones, el rebranding del emporio Facebook responde a la crisis de imagen que desataron los Facebook Files de Frances Haugen, “la filtradora” (N57P06). Aquí (en el meta Meta, dice Piccoli) se documenta la historia. A pesar de los escándalos, Facebook nunca perdió plata. Hoy tiene tres mil millones de usuaries: la población de China, India y Brasil juntas.
El nuevo nombre no cayó bien. Se dijo “META: Make Everything Terrible Again”, y “Meta es una abreviatura de metástasis” (hasta Alexandria Ocasio-Cortez). Jack Dorsey, de Twitter, fue al diccionario “meta: referido a sí mismo oa las convenciones de su género; autorreferencial”. Y sí.
“Nada parece fuera del proyecto, menos la diversidad lingüística”, tuiteó Jorge Carrión. Es cierto. En Israel se burlan porque en hebreo “meta” significa “muerto”. Y en español, ni hablar. Lo mejor que se puede asociar es la acepción uruguaya, algo así como “dale”. (Me encantó este hilo analizando el uso argentino de “meta y meta”).
Tuiteó @jonronson: “Voy a llamar a Facebook por su deadname (N40P02), lo siento”.
3. Destransicionar
Hablando de deadname… Entre la catarata de fotos de la multitudinaria Marcha del Orgullo LGBT+ en Buenos Aires (¡800 mil personas!) me crucé con esta palabra por primera vez. “La gente que des-transiciona.. resulta que muchas personas lo hacen por presión externa :/”, tuiteó Ophelia Pastrana. Mostraba esta tablita titulada “Razones por las que les encuestades destransicionaron, al menos por un tiempo”. La fuente es un informe estadounidense de 2016, “El reporte de la encuesta transgénero estadounidense 2015”. Y lista entre las primera razones para revertir una transición de género “presión de padre o madre” (36%), “transicionar era demasiado duro” (33%), “sufría demasiado acoso o discriminación por ser trans” (31%), “tenía dificultades para conseguir un trabajo” (29%), y “presión de otre miembre de la familia” (26%).
Dificultades para conseguir trabajo.
El cartel más repetido en la Marcha del Orgullo llevaba una pregunta: ¿dónde está Tehuel? Hace casi ocho meses, Tehuel de la Torre, un varón trans, salió a una entrevista de trabajo. Nadie volvió a verlo.
4. Psiquímica
Esta volvió con el recuerdo de Congreso de futurología, de Lem, que le agradezco a Pablo Valle (y a Zuckerberg y su metaverso, y a quien trajo esta imagen, claro). “Publicada en 1971, Congreso de futurología pertenece al ciclo de relatos protagonizados por Ijon Tichy. En ella Stanislaw Lem hace un magistral retrato de la aspiración al bienestar del hombre contemporáneo a través de la ironía y el humor. Tras un período de hibernación, Tichy es reanimado en el año 2039 y encuentra un mundo en el que impera la paz y reina un bienestar general; en esa sociedad controlada por la ‘psiquímica’, se aprende y se ama por medio de productos químicos, los sentimientos son manipulados y toda espontaneidad ha dejado de existir. Bajo una apariencia exterior de abundancia y de confort, Tichy descubre, sin embargo, una realidad sobrecogedora que supera a la más fantástica alucinación.” Publicada hace 50 años.
Me hace pensar en las distopías biopolíticas de Hernán Vanoli, cuatro décadas después.
Pienso en el litio, a la vez psiquímico y tecnomineral.
5. Ecoposturetas
Como se aprecia en el meme, más acá del más allá del metaverso, antes y después del efecto de la psiquímica, seguimos con las patas en el mundo material. Desde el lunes se está celebrando (¿celebrando?) la COP26, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. Greta Thunberg la llamó “un festival de ecoposturetas” y “un fracaso”, y dijo que solo se hacían “promesas bonitas” y “bla bla bla”. Bueno, lamentablemente no dijo exactamente eso. Dijo en inglés: “This is a Global North greenwash festival. A two-week celebration of business as usual and blah blah blah”. Hay que decir que la traducción creativa de “ecoposturetas” levanta mucho, aunque pierda algunos detalles. Greta también dijo que la cumbre era “la más excluyente de todas”, y “un encuentro de relaciones públicas”.
Algunas postales contra les ecoposturetas: el Ministro de Justicia, Comunicación y Exterior de Tuvalu, Simón Kofe, dio su discurso con el agua hasta las rodillas, desde una zona costera que solía ser tierra firme pero gracias al cambio climático es zona inundada. Bien por sus equipos de comunicación, que entendieron que nada transmite mejor que un meme. En las calles de Glasgow, les activistas marcharon con carteles que dicen “los mares se están levantando y nosotres también”. Se vieron además activistas del Amazonas pidiendo parar la deforestación, que llevó a que lo que antes era selva que absorbía hoy sea fuente de carbono (N45P03).
6. Don Panos
En una de las mesas de la COP, en Glasgow, la ONG argentina Casa Común denunció que unos 700 habitantes de Presidencia Roca, en el Chaco, sufrieron vómitos, diarrea y deshidratación por fumigación a fines de octubre. “El domingo, después del mediodía, empezaron a manifestarse muchos niños con diarrea y vómitos, el lunes se veía cola de más de 50 personas en el hospital por la mañana y la tarde”, se dice en el portal Infoqom. Esto pasó unos días después de que les vecines vieran que “una avioneta grande oscura estaba fumigando los campos del establecimiento Don Panos”. Además de la intoxicación generalizada en las personas, el paso de la avioneta arruinó huertas y cultivos familiares.
Según Infoqom, esta estancia “es utilizada por el actual gobernador Jorge Capitanich para hacer ‘base’ en plena campaña proselitista”. Esta nota de 2020 lo muestra “recorriendo el establecimiento”, donde se cultiva soja y algodón.
La estancia Don Panos tiene hasta aeropuerto, como se puede ver aquí. En una nota de 2018 publicada en el portal Chaco al Día se cuenta que pertenece al Grupo Eurnekián. En 2012, un campesino de la localidad de Pampa del Indio, Mariano Peñaloza, había logrado una cautelar para impedir que fumigaran a menos de 500 metros de su casa. En 2018 esta medida se violó y Mariano Peñaloza terminó en el hospital.
7. Desigualdad de carbono
Ya hablamos de desigualdad sanitaria (N21P06) y de desigualdad a secas (N22P10). Este viernes, Oxfam presentó el informe “Desigualdad de carbono 2030”. En él se estima que para 2030, el 1 por ciento más rico del planeta generará 30 veces más emisiones de carbono de lo necesario para alcanzar las metas de aumento de temperatura de 1,5 a 2 grados (un aumento que ya es irreparable). Este 1 por cierto de archimillonaries emite más carbono que la mitad más pobre de la población mundial. Para lograr el objetivo de mantener el calentamiento global bajo la línea de 1,5 grados, este 1 por ciento más rico debería recortar sus emisiones en un 97 por ciento. Sería más desigualdad de responsabilidades.
8. Hidrógeno verde
El martes amanecimos todes hablando de hidrógeno verde. Estaba en todos los noticieros y los newsletters. Así lo cuenta Elisabeth Möhle en Cenital: “El lunes pasado, también en el marco de la COP, autoridades de la empresa australiana Fortescue anunciaron una millonaria inversión para producir hidrógeno verde en Argentina. Según declaraciones de la empresa, ya iniciaron trabajos de prospección en Río Negro y en el proyecto demandará una inversión de U$S 8.400 millones y creará 15.000 puestos directos de trabajo y entre 40.000 y 50.000 indirectos de aquí a 2028. De esta manera, se espera convertir a Río Negro en un polo mundial exportador de hidrógeno verde en 2030. Para 2040 se prevé contar con una capacidad de producción de 2,2 millones de toneladas anuales, lo que cubriría una producción energética equivalente a, por ejemplo, la necesaria para cubrir el consumo de 1.600.ooo hogares o casi un 10% de la energía eléctrica consumida por Alemania en un año.” Es la mayor inversión extranjera en dos décadas.
La empresa Fortescue es de Andrew Forrest, un multimillonario australiano que quiere ser líder mundial de la producción de hidrógeno verde, uno de los combustibles considerados “limpios” en términos ambientales (en relación a los combustibles fósiles). Aquí explica por qué le interesa este negocio. Su contacto y socio en Argentina es el ex rugbier y actual empresario Agustín Pichot, a quien conoció a través del deporte; lo cuenta Pablo Ibáñez en esta nota.
Se lo llama hidrógeno verde porque se genera con energías limpias, pero en el fondo es hidrógeno nomás. El hidrógeno no es una fuente de energía, sino un vector. Es el elemento químico más abundante en la naturaleza; el tema es separarlo de otros. “El hidrógeno verde se obtiene por electrólisis a partir de fuentes renovables. Este proceso consiste en la descomposición de las moléculas de agua (H2O) en oxígeno (O2) e hidrógeno (H2)”, se explica en Chequeado. Para eso, la idea es usar agua de mar y energía eólica, dos recursos disponibles en la costa de Río Negro. Hasta ahora, el 96% del hidrógeno que se produce usa energía proveniente de combustibles fósiles.
9. Molnupiravil
Esta me cabeceaba hace un par de semanas, y el jueves Pablo Fisher la postuló a palabra del año. Tiene con qué.
El molnupiravil es el primer remedio comprobado contra el COVID. Es un retroviral que se administra en píldoras y mostró que puede reducir a la mitad los casos graves de COVID-19 y las hospitalizaciones. Y, por último pero no menos importante: su nombre está inspirado en el martillo de Thor, Mjölnir.
Fue desarrollado por la Compañía de Innovación Farmacológica de la Universidad de Emory (DRIVE), y después comprado por Ridgeback Biotherapeutics, que más tarde se asoció con Merck. El jueves, la Agencia Reguladora de Medicamentos de Reino Unido (MHRA) aprobó su uso para personas “con sintomatología leve a moderada y con al menos un factor de riesgo asociado a mayor gravedad del síndrome, como la obesidad, edad avanzada, diabetes y padecimiento coronario”. También la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) aprobó su uso “de emergencia”.
El molnupiravil ataca la enzima que utiliza el virus para replicarse. Esto debería hacer el tratamiento igual de efectivo ante las diferentes variantes del virus. “Como bien saben, es probable que veamos una evolución continua de esas variantes”, dijo en una entrevista Dean Li, jefe de investigación y desarrollo de Merck. “Nuestra predicción es que el molnupiravir lleva el nombre adecuado -el nombre del martillo de Thor [Mj[olnir], este es un martillo contra el SARS-CoV-2 independientemente de la variante”.
No se termina acá: el 28 de octubre se supo que Merck le está abriendo la licencia del molnupiravil a Medicines Patent Pool, una ONG con respaldo de la ONU que trabaja por democratizar el acceso a las patentes médicas. Con esta movida, miles de laboratorios de todo el mundo podrán fabricar la píldora simultáneamente.
Y hay más: para no quedarse atrás, Pfizer presentó el viernes ante la Food & Drug Administration de Estados Unidos otra píldora antiviral, que también impide que el virus se reconozca. Se llama paxlovid; según la compañía, reduce las hospitalizaciones y muertes por COVID-19 en un 89 por ciento. Si bien solo llegaron a la fase 2 de los ensayos clínicos, los resultados serían tan contundentes que ya pidieron autorización para fabricar el fármaco.
¿Será que de verdad la pandemia empieza a irse en fade?
10. Partenogénesis
“Dos cóndores hembras fueron capaces de reproducirse sin necesidad de aparearse con un macho”, titula Página 12. “Es la primera vez que se documenta una reproducción por partenogénesis en la especie.”
Desconfío. Busco otra fuente. Deutsche Welle: “Científicos registran primeros casos de ‘partos vírgenes’ en cóndores de California. Los investigadores creen que es el primer caso de reproducción asexual en cualquier especie aviar en el que la hembra tuvo acceso a una pareja”.
La noticia llega desde la Alianza para la Vida Silvestre del Zoológico de San Diego, California. Hay un paper, publicado en Journal of Heredity: “Facultative Parthenogenesis in California Condors”. El abstract dice: “La partenogénesis es un acontecimiento relativamente raro en las aves, documentado en huevos no fecundados de hembras columbiformes, galliformes y paseriformes sin acceso a los machos. En el cóndor de California, que está en peligro crítico, el análisis de parentesco realizado utilizando microsatélites polimórficos ha identificado dos casos de desarrollo partenogenético a partir de los huevos de dos hembras del programa de cría en cautividad, cada una de ellas alojada continuamente con un macho reproductivamente capaz con el que habían tenido descendencia. Se excluyó la contribución genética paterna a los dos polluelos. Ambos partenotes poseían los cromosomas sexuales ZZ masculinos esperados y eran homocigotos para todos los marcadores evaluados heredados de sus madres. Estos hallazgos representan la primera identificación basada en marcadores moleculares de partenogénesis facultativa en una especie aviar, especialmente de hembras en contacto regular con machos fértiles, y se suman a la amplitud filogenética de los taxones vertebrados documentados que se han reproducido por vía asexual.”
Vi pasar dos tuits comentando esta noticia con la misma frase (acá y acá): “Se cayó nomás”.