“Inmediatamente después de que las noticias de la noche muestren informes sobre sequías, incendios y olas de calor, publican historias que glorifican a Richard Branson y Jeff Bezos quemando toneladas de combustible para cohetes para jugar en el espacio durante unos minutos como el comienzo del ‘turismo espacial’”, tuiteaba Barbara Banfield en respuesta al tuit de los salmones muertos de calor en el río Sacramento.
No es la única en notarlo. En el artículo “¿Por qué los milmillonarios están tan obsesionados por ir al espacio?”, publicado el viernes en The Guardian, Thomas Moynihan sostiene que esta tecnoelite piensa en la famosa idea del planeta B. “El fundador de Tesla, Elon Musk, sostiene que al convertirse en ‘multiplanetarios’, los humanos podrían obtener una protección ‘a prueba de fallos’ contra los riesgos de extinción o colapso planetario, mientras que Jeff Bezos, de Amazon, habla de ‘salvar la Tierra’. Si la civilización perece en un planeta, estos multimillonarios parecen pensar que tenemos un respaldo en otro lugar”. Ya en 2018, Elon Musk sostenía que “es importante lograr una base autosustentable en Marte (N25P10)” como escenario hipotético ante “una tercera guerra mundial”. En la páginia de Marte del sitio de su empresa espacial Space X, la primera línea dice: “El camino para hacer a la humanidad multiplanetaria”. Suerte con eso. Parece que para Musk, es explorar el espacio o hacer saltar la criptobanca con memecoins (N35P07).