Tres días después, Putin dio otro discurso. Eran las cinco de la mañana del jueves en Moscú. “Las repúblicas populares de Donbass se han acercado a Rusia con una petición de ayuda. En relación con esa conversación he tomado la decisión de lanzar una operación militar especial. Su objetivo es proteger a las personas que han sido objeto de abusos y genocidio del régimen de Kiev durante ocho años, y para ello buscaremos desmilitarizar y desnazificar Ucrania” dijo, según la traducción de El Mundo.
“Operación militar especial” ya está en el libro de oro de los eufemismos.
En Rusia “desnazificación” carga con su “bobina de tiempo hecha con los hilos de miles de operaciones históricas”. El compost del tiempo, como dice Rebecca Solnit.
“La desnazificación (en alemán: Entnazifizierung) fue una iniciativa de los ejércitos aliados después de su victoria sobre la Alemania nazi. Reforzada por la Conferencia de Potsdam, debería resultar en ‘la depuración’ de sociedad, cultura, prensa, justicia y política de Alemania y Austria de toda influencia nazi”, explica la Wiki. “El término fue acuñado por el Pentágono de Estados Unidos en 1943” (…) “En Alemania Oriental se consideró un elemento fundamental para la transformación del país en una sociedad socialista”.
“En el imaginario ruso, el nazismo representa el enemigo supremo, que fue vencido por el pueblo ruso en la gesta bélica más heroica jamás ocurrida”, dice Leonardo Pataccini en Télam. “El origen de ultranacionalismo contemporáneo en Ucrania está íntimamente vinculado al nazismo. Durante la segunda guerra mundial, los grupos ultranacionalistas ucranianos liderados por Stepán Bandera se aliaron con el ejército nazi en contra del enemigo común, la Unión Soviética. (…) Cuando estalló la guerra civil en la región del Donbass, en el este del país, se formaron batallones de voluntarios de extrema derecha para combatir contra los separatistas pro-rusos. Durante este período, el estado ucraniano fue permisivo con el auge de la extrema derecha y el ultranacionalismo. Sin embargo (…) los partidos de neonazis como “Svoboda” (“Libertad”) son fuerzas marginales que no apoyaron a Zelensky en las elecciones de 2019”.
Resume Fernanda Kobelinsky: “Putin habla de desnazificación para traer a la memoria el colaboracionismo de una parte de Ucrania”.