El palabro, como dicen en España. Literalmente un pecado con un culo en el medio.
“Condenan al ex gobernador Sergio Urribarri a ocho años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos”, contaba Emilia Delfino en El Diario Ar, el jueves. “El tribunal de Paraná lo declaró penalmente responsable del delito de peculado por la malversación de unos US$9 millones de la provincia y por el delito de negociaciones incompatibles durante su gestión en la provincia.” Entre otras cosas, fue condenado por usar fondos públicos de la provincia para financiar su breve carrera como precandidato presidencial.