La historia de la familia pluriparental de Orán me lleva a Poeta chileno, la novela de Alejandro Zambra publicada y tan leída en 2020.
“Familiastra” es el nombre del tramo central, donde el protagonista convive con su novia y el hijo de ella. Él cría al chico a la par de su madre, mucho más que su padre biológico, y se preocupa por la naturaleza y el nombre de esa relación.
“Tomó el diccionario y buscó la palabra padrastro. Leyó la primera acepción: ‘Marido de la madre, respecto de los hijos habidos por ella’. La segunda decía directamente ‘Mal padre’. La tercera le era desconocida: ‘Obstáculo, impedimento o inconveniente que estorba o hace daño en una materia’. Hasta la cuarta acepción, más bien técnica, le pareció humillante: ‘Pedazo pequeño de pellejo que se levanta de la carne inmediata a las uñas de las manos y causa dolor y estorbo’ (…)
Lengua española de mierda, pensó de nuevo (…). Ninguna palabra española terminada en el sufijo astro significaba o podía significar más que desprecio e ilegitimidad. El calamitoso sufijo astro ‘forma sustantivos con significado despectivo’, decía la RAE: musicastro, politicastro.
La misma fuente definía la palabra poetastro simplemente
como ‘mal poeta’.
-¿A qué se dedica tu padrastro?
-Mi padrastro es un poetastro -imaginó a Vicente respondiendo a eso.”
Después de seis años, la pareja se separa y él pierde esa familia en un segundo. Lo único que no se pierde, se verá al final, es lo que se dio.
Otro tramo:
“—Chao, abuelastra —interrumpió oportunamente Vicente.
—¿Por qué me dices así? —preguntó Mirta, contrariada.
—Porque eres la mamá de mi padrastro, o sea que eres mi
abuelastra, respondió el niño.
El padre de Gonzalo también salió a despedirlos.
—Chao, abuelastro —dijo Vicente.
—Chao, nietastro —respondió jovialmente el aludido.
—¡Chao, familiastra! —gritó Vicente desde la ventana del
auto, a manera de despedida.”
Pensé que “familiastra” era un invento Zambra, pero de verdad existe: es un sinónimo de “familia ensamblada” o “familia reconstituida”, como traducción de stepfamily. Según la Wiki, se evita por “la connotación negativa de las palabras con el sufijo –astro”.
O sea que yo también crecí en una familiastra, o en varias. Tiene sus ventajas: mis hijas disfrutan de siete abueles.